Los nuevos auditores de la Contraloría General, a lo largo de su carrera profesional, deberán acreditar experiencia para poder ascender y alcanzar ciertos niveles de la carrera.
Por Koko Zavala. 16 agosto, 2021.
El club de Ciencias Políticas de la Universidad de Piura entrevistó al contralor general de la República, economista Nelson Shack, para esclarecer algunos aspectos del “Control concurrente”, un nuevo modelo de control gubernamental que vendría a reemplazar a las auditorías (“Control posterior”).
Equipo multidisciplinar
Al respecto, Shack explicó que, el modelo de control concurrente es preventivo y lo debe hacer un equipo multidisciplinario de profesionales especializados, que acompañará, de principio a fin, la elaboración y realización de cada proceso. Por ello, control concurrente requiere de un equipo formado por un ingeniero, un economista, un contador, un auditor y un abogado para su buen funcionamiento.
Además, señaló que “es interesante saber que en el Perú nadie estudia Auditoría como licenciatura. Por eso, los auditores, formal y legalmente reconocidos, son los contadores públicos colegiados que se certifican como auditores”.
“Con esto queremos coadyuvar a que las obras se hagan bien y no tener 3000 obras paralizadas por casi 30 000 millones de soles en todo el Perú”. Con esto, tal y como menciona el contralor, lo que se busca es evitar o prevenir riesgos de inconducta funcional o corrupción y exponer a la ciudadanía lo que está pasando, activando de esta manera el control social.
Nueva carrera para el auditor
La lógica del acompañamiento genera valor, porque está conformado por un equipo multidisciplinario. De un tiempo a esta parte, dice el contralor, en el marco del proceso de reformas, han entrado a la Contraloría cerca de dos mil personas, la mayoría abogados, economistas, contadores e ingenieros; y van a seguir entrando más, especialmente de las distintas ramas de Ingeniería, de Medicina y otros especialistas requeridos en la gestión pública.
Estos grupos de especialistas tienen la experiencia para ejercer esas funciones de control, pero se necesita mejorar, anota. Como se trata de un nuevo modelo de control, cuya tarea es permanente, se ha iniciado un proceso de fortalecimiento de las capacidades de los auditores, con el fin de “institucionalizar la experiencia en la gestión”, recalcó Shack.
Así mismo, apuntó que se espera que esta propuesta se consolide a fines de este año con la nueva profesión “auditor gubernamental”. Actualmente, es un proyecto de ley que se encuentra en espera de la aprobación del Congreso.
